09/01/2017

Debate

Escrito por Pedro O'sheanagan

Parece que no va a ser la última vez que nos encontramos en un debate con el sempiterno argumento de que los Sindicatos no defienden a la clase trabajadora, que se dedican a defender únicamente "lo suyo".

Creemos que hay un problema inicial que ha provocado un distanciamiento entre la lucha sindical y los y las trabajadoras. Nosotras lo achacamos principalmente al modelo sindical impuesto en la llamada "Transición", basado en Elecciones Sindicales para elegir a nuestros "representantes". Con ello se delega nuestra responsabilidad de luchar en primera persona contra los abusos de la Patronal. Esto provoca que a los Sindicatos se nos vea como a organismos oficiales, partes de un Ministerio, o como Osakidetza, o como Hacienda, y por ello nuestra obligación de defender a todas las personas que trabajan por el mero hecho de llamarnos Sindicatos.

Sin embargo no podemos olvidar que un Sindicato es una asociación de personas y que su capacidad nace de su
fuerza y que esto sólo se consigue con la participación del mayor número de trabajadoras posible. Nada nuevo. Sencillo.

Evidentemente nos encontramos dentro de una espiral de falta de confianza hacia la lucha sindical y de una debilidad sindical que se retroalimentan. Es una de las consecuencias principales de un modelo sindical del que nos gustará hablar en otra ocasión.

Una de nuestras labores prioritarias debe ser la de recuperar la confianza de nuestras compañeras y animarlas
a sumarse a la pelea diaria que es enfrentarse al trabajo y a defender nuestros derechos. Con honestidad y responsabilidad, ahí están nuestras Secciones Sindicales. La Revolución, sin olvidarla, la dejamos para más adelante.