Tras el cierre de sus oficinas en Barcelona, la empresa Panda Security –conocida por sus productos informáticos- ha reducido sus respectivas plantillas en Bilbao y Madrid en torno a un 4%.
“Ha habido nuevos despidos, todos en el área de Ventas. Nos cuentan que han descendido las ventas, pero… ¿Y el margen de beneficios? ¿Acaso también han descendido los salarios de los miembros de los diferentes consejos o de los inversores? Eso no lo cuentan, ni tampoco aparece en sus cuentas”, ha denunciado la sección sindical de CNT en Panda Security.
En tal sentido, este sindicato ha subrayado que “desde 2008, y tras la entrada de inversores -Fondos de Capital Riesgo- no han parado los despidos”. Entre 2008 y 2011, fueron cesados unos 40 trabajadores al año. 2011 será recordado como el año de la aplicación del ERE, lo que derivó en el despido de otros 128 empleados. “Tras el ERE –ha advertido CNT- seguimos con la misma tónica: unos 15 despidos al año”.
“En algunos casos se sustituye a la trabajadora o trabajador despedido, aumentan las personas contratadas a través de empresas cárnicas –llamadas ‘consultoras’-, se aumenta la carga de trabajo del resto de la plantilla o se deslocaliza el servicio a otro lugar del mundo donde los salarios sean más bajos”.
En este contexto, CNT ha lamentado que “la solidaridad con los despedidos no ha sido la que debiera darse, sobre todo en estos tiempos”. “Las clases más desfavorecidas deberíamos unirnos y responder, antes de que tú puedas ser el próximo. Unidos podríamos hacer frente al capital y sus gobiernos títeres”, ha subrayado.
“El capital está unido –ha puntualizado la organización anarcosindicalista-, los de arriba se alían y su única bandera es la del color del billete que llevan en la cartera. Mientras, nosotros nos creemos que la lucha de clases ya no existe y nos ponemos a defender patrias o equipos de fútbol”.
Frente a esta situación, la sección sindical de CNT en Panda Security ha animado al personal de esta empresa a “defenderse”. “Esperamos que la plantilla sea consciente y luche por sus derechos. Si no lo hacemos, nos podrán plantar otro ERE y nos veremos en la calle”, ha advertido. Por ello, ha recalcado que “mediante paros o huelgas se podría cambiar la conducta de la empresa”.
